A Sakura le dieron el alta a los dos días… después de despedirse en el hospital de todos sus amigos, Sai la acompañó a ella y al bebé a su nuevo hogar. La casa era de dos pisos… tenía un cuidado jardín en la parte delantera… en el piso de abajo se encontraban la entrada principal, un salón, la cocina un baño, y una sala que Sai reformó para que se convirtiera en la salita del niño… si subes las escaleras te encuentras con un pasillo, que daba a 2 puertas, la primera era la principal, tenía un baño. Y la segunda era la habitación del niño… al principio Sakura decidió que la cuna estaría en su habitación… estaba muy bien decorada con motivos infantiles, las paredes con un tono azul al igual que las cortinas… Desde luego Sai había echo un gran trabajo…
Sakura llevaba al niño envuelto en una manta, Sai iba detrás de ella cargando la maleta donde estaban las pertenencias de Sakura. Ambos entraron a la casa, mientras ella colocaba a su bebé en la cuna que estaba colocada, enfrente de la cama, Sai dejó la maleta en uno de los sillones que había cerca…
-Sakura¿Cómo lo vas a llamar?
-No se… -no podía apartar la vista de su niño, dormía tan tranquilo-
-¿Y de… apellido? –Sakura suspiró-
-Haruno…
-Sakura… yo… -Sai e acercó a ella e hizo que le mirara- si tu quieres, bueno… que mi no me importaría darle mi apellido al niño
-Sai… -estaba sorprendida, Sai había echo tantas cosas por ella… y ahora hasta estaba dispuesto a reconocer a su hijo- ya has hecho demasiado por mi… gracias por todo pero esto… -lo miró agradecida- sería demasiado
-Sakura… yo quiero ayudarte
-Ya lo has hecho –dio acariciándole el rostro- más que nadie, y nunca tendré tiempo suficiente para agradecértelo…
-No tienes que agradecerme nada… -Sai suspiró- Me gusta Tasuke
-¿Tasuke-chan?… suena bien, me gusta -Sakura rió- de acuerdo se llamara Tasuke
-Si no te gusta no tienes por que ponerlo, la mamá eres tú
-lo sé… pero me gusta
Dos meses después…
El sonido del timbre anunciaba que alguien espera enfrente de la casa de Sakura…
-Mamá… -dijo Sakura alegre mientras abrazaba a su madre- pasa…
-Hola cariño¿Qué tal?
-bien y ¿tú?
-Muy bien como siempre¿Dónde esta mi nietecito?
-Está arriba durmiendo, al fin… -La pelirrosa suspiró- lleva una semana que no me quiere dormir por las noches…
-Es normal cariño, aunque es una pena que no saliera como tú…
-¿Dormía mucho?
-Cariño… dormías todo el día –Sakura rió-
Madre e hija subieron hasta donde estaba el pequeño, la madre de Sakura era una mujer guapa, Sakura había sacado los ojos de ella. Era pelirroja y mas o menos de la altura de su hija… le gustaba mucho arreglarse, casi siempre vestía quimonos. En esta ocasión llevaba un kimono de color rojo.
-Le traje un regalo a mi pequeño
-Gracias mamá no tenías por que…
-Como quieres que no consienta a mi único nieto…
Le extendió un paquete a su hiaj que contenía un preciso kimono para cuando el bebé. Los padres de Sakura eran comerciantes, y sinceramente la vida de comerciante es mejor que la ninja, y ya que Sakura era su única hija, el matrimonio solo tenía que consentirla a ella, y bueno... ahora a su nieto.
-Gracias mama es preciso… -Dijo guardando el kimono blanco con un obi azul-
-Es a juego con el tuyo
-Ya me había dado cuenta –se rió-
-Le servirá para cuando sea el festival de Konoha…
-¿Eso es dentro de ocho meses no?
-Si más o menos, va a ser el niño más guapo de todo el festival –Dijo Midori, su madre-
-mamá –suspiró…-
-¿Que?... ¿Por cierto no le das pecho?
-Claro que sí ¿por que lo preguntas?
-¿Cual es tu secreto para que no se te caigan los pechos?
-¡Mamá! –Gritó avergonzada Sakura-
-Es enserio hija –le respondió una inocente Midori- has vuelto a tu peso normal y los pechos con la que te han crecido deberían caerte, aunque seas joven
-¡Mamá! Hago mucho ejercicio es normal –el rostro de Sakura había pasado por toda la gama de colores cálidos, desde el rosa pastel hasta el rojo intenso-
-¡A será eso!
4 meses después…
El pequeño Tasuke tenía ya seis meses, no hacia gran cosa… Se pasaba el día comiendo, durmiendo, jugando y gateando… Sakura no le sacaba el ojo de encima, y si alguna vez Tsunade la mandaba alguna misión no podía dejar de pensar ni un solo segundo en él… En esos casos el niño se quedaba con sus abuelos o con Sai que se había ofrecido a cuidarlo…
Esa misma tarde Sai tenía el día libre y quiso pasarlo con su amiga y su hijo… Estaban en el jardín. Sakura sentada en un banco a la sombra mirando como Tasuke y Sai jugaban sentados en la hierba. Tasuke jugaba con unos cubos de colores. Bueno Sai los colocaba unos encima de otros y Tasuke los tiraba. Era una imagen tan tierna…
-Venga Tasuke no los tires –Dijo Sai colocando la última pieza-
-¡ahh! –El pequeño lo miró un segundo, serio- ¡Yiaaa! –De un golpe tiró todo el montículo de cubos, Tasuke se echó a reír con todas sus ganas-
-Con que poco te diviertes –iba a empezar a colocar otra vez los cubos pero Tasuke cogió una pieza roja y se la tiró, le golpeó justo en el centro de la frente, el pequeño se volvió a reír con más ganas, esta vez acompañado de su madre, que al ver la escena no pudo evitar reírse-
-Sakura de él me lo esperaba pero de ti… -dijo gracioso el moreno-
-Lo siento –dijo entre risas- pero es que te dio justo… en medio –logró decir-
-Cuanta risa –Sai se levantó con el pequeño en brazos y se sentó al lado de Sakura en el banco-
-Venga admítelo es gracioso –Dijo ella dejando un hueco para que el moreno se sentara-
-Tiene mamitis –Dijo al ver que nada más sentarse cerca de su madre el pequeño casi se lanzaba a ella-
-No digas eso –El pequeño se acurrucó en el pecho de su madre, abrazando con su pequeña manito una de las tiras de la camisa-
-Lo que tiene es suerte –Sakura le dio un suave golpe-
-Tonto –besó la frente de su pequeño-
-¿Venís conmigo al festival?
-Vale… será el primer festival de Suke-chan...
Los tres pasaron la tarde juntos… pero en otro lugar dos personas no parecían tan felices...
________________________________________
-¿me puedo fiar de esa información? -Preguntó una desconfiada Tsunade a su amigo y compañero Jiraiya -
-¡Claro que si!, es de una de mis más fiables fuentes
-¿Cómo ocurrió?
-No lo sé, tan sólo tengo información de que Orochimaru esta muerto, y que el culpable de esa muerte es el Uchiha
-Te das cuenta de que si esa información es errónea te mataré ¿no? –Le avisó Tsunade-
-Que violenta –respondió con una gota en la cabeza-
-¿Crees que deberíamos informar de esto?
-No, tan solo a los capitanes Ambu como mucho
-Pero…
-Tsunade, cuanta más gente sepa eso peor…
-Tienes razón, no se dirá esto a nadie queda entre tu y yo… al menos hasta que tenga más noticias del mocoso ese
-De mocoso no tiene nada mató a nuestro antiguo compañero
-Mató a un Orochimaru destrozado
-Orochimaru al fin y al cabo…
-Sabes que no es lo mismo…
-Ya…
-Si él va a por su hermano se está cavando su propia tumba
-¿Crees que Sasuke aun es más débil?
-Por supuesto, estamos hablando del mismísimo Uchiha Itachi, no es un ninja cualquiera -Dijo segura Tsunade-
-Sasuke tiene más potencial que su hermano
-Tú mismo comprobaste su nivel, ambos lo comprobamos –Dijo Tsunade ya cansada de la discusión-
-¿De verdad crees que ese era el nivel del chico? –Dijo en un tono burlón Jiraiya-
-Se que no nos mostró todas sus habilidades, pero de ahí a que haya superado a su hermano…
-No sé… yo de ese chico… me espero, cualquier cosa… -Tsunade negaba con la cabeza, el Uchiha le causaba tantos problemas…-
No hay comentarios:
Publicar un comentario